El cajero automático esa máquina expendedora usada para extraer dinero utilizando una tarjeta magnética de crédito, ha ido evolucionando para dar nuevos servicios de una forma mas cómoda y segura.

En la actualidad la mayoría de los cajeros automáticos tienen pantalla de color, táctil en muchas ocasiones y ofrecen toda clase de servicios e información, a parte de sacar y meter dinero, ver últimos movimientos y recargar el teléfono móvil.

Todavía hoy se pueden encontrar en Salamanca muchos cajeros automáticos con pantallas de fósforo verde de varios bancos. Estos monitores vivieron su edad de oro sobre los años 80, por lo que encontrarlos en funcionamiento me permite hacer la siguiente reflexión:

Independientemente de la imagen “retro” que ofrece el banco, la escasez de servicios ofrecidos por este sistema y la incomodidad en el uso y lectura del interfaz, otros cajeros ofrecen pantallas táctiles a color y teclados qwerty, es de admirar como el servicio de mantenimiento encuentra componentes para las reparaciones, haciendo que los cajeros sigan operativos y la robustez de la máquina, que sigue ofreciendo día y noche, de manera ininterrumpida, servicio a sus usuarios.

Si la mayoría de sus clientes solo quieren sacar dinero o recargar el móvil y obtener de vez en cuando un listado de últimos movimientos, ¿Por que actualizarse? ¿están los cajeros automáticos de la calle, condenados a una evolución tecnologica más lenta, que el ritmo tecnológico de la oficina? ¿Que opinas? ¿Tienes en tu ciudad o barrio cajeros así o más antiguos?